Cuando tenemos intención de evaluar nuevos materiales en nuestras parcelas o invernaderos, debemos de generar las condiciones adecuadas, para ver si los nuevos materiales compiten kilo por kilo, bajo nuestros cuidados y con la tecnología que tenemos a nuestro alcance.
Para lograr esto, debemos encontrar la mitad de nuestra parcela, y partiendo de ahí, con la cantidad de plantas que tengamos disponibles, debemos ir avanzando hacia los lados, para dejar “encapsulada” la muestra en medio de la parcela.
Con esta simple práctica, evitamos que factores como un mal riego, mayor o menor incidencia de los rayos del sol, mayor o menor humedad o viento debido a las paredes del invernadero, logren sesgar la evaluación.
